lunes, 27 de julio de 2020

La puerta esta cerrada, tiré las llaves.


Hace unos meses me imaginaba que moriría si no te tenia en las noches o si no te besaba en las mañanas, era normal verte llorar y observarme por el reflejo de tus ojos cabizbaja, confundida, sofocada y aislada. Me recuerdo sentada en la orilla de la cama, con lagrimas en los ojos preguntándome porque jamás estabas feliz, porque ya no sentía tu brazo rodearme en la noche...Era de noche cuando nos dejamos, las venas salidas del coraje, el corazón bombeando llanto y tu mirada juzgona dándome una lección de desapego.

Era de día cuando me sentaba viendo al techo con los ojos desorbitados imaginando diálogos irreales, diálogos donde te decía adiós y tu me pedías que eso fuera un "hola". Recuerdo el sabor del ultimo beso, el calor del ultimo abrazo y el frió de la cama esa noche. 

A veces navego en mi inconsciente buscando los besos fríos de tus labios secos sabor a fresa, pero solo encuentro el sabor a sal en mis labios, la sensación de impotencia y el dolor de mi rodilla izquierda mientras caminaba para abrir la puerta y dejar que te fueras. 

Te fuiste, nos fuimos.

Han pasado unos meses desde nuestro ultimo "te amo" y por mas extraño que parezca, creo que cuando cruzaste esa puerta, un pedazo de mi corazón se fue contigo y jamás volvió a mi, y no, no duele ni rompe, solo se fue, como tu, como nosotras. 

Hoy ya no lloro por ti, tampoco añoro tu presencia y no extraño mi ropa ni mi reloj. No necesito tus pestañas molestando mis mejillas y ya no busco en la noche tus pies para calentar los míos. Dejé de cantarte en todas las canciones y le puse un final a la película efímera e infalible de nuestro amor. 

Ayer mientras pintaba nuestros recuerdos, me di cuenta de que solo necesitaba unas capas de color más y podía quedar sepultado aquel sábado que decidimos prometer jamás irnos... Comprendí que nuestro jamás, jamás fue eterno y que nuestro ultimo beso se quedó en esa noche lluviosa junto a ti. Me quedo con la efímera nostalgia del recuerdo del amor que no fue, y con el amor intrépido que te regalé. 

Me quedo sin ti, con la puerta cerrada y el cerrojo puesto... Las luces apagadas porque no hay nadie en nuestra casa, el perro me lo llevo a dormir conmigo y las mil fotos las dejo en nuestra recamara... Dejo en la entrada una nota sin nada escrito y el viejo anillo que juramos volver una historia inolvidable. Apago nuestra ultima vela, la que prendimos cuando creímos ser almas gemelas y bailamos por encontrarnos, dejo atrás de nuestros cuadros un ultimo beso y cierro la nevera donde guardamos mil recetas improvisadas... Me quedo viendo el pasto de sentimientos seco, la canción mágica que poníamos se vuelve una canción mas y nuestra historia un cuento olvidado en un cajón... Me quedo sin ti, pero conmigo.





martes, 1 de octubre de 2019

Un obsequio para ti, mi amor.

Te regalo el suéter que te presté la última vez que nos vimos, y también te regalo el abrazo de la ultima noche que dormimos juntas.

Te regalo ese ultimo beso que te di, y esa caricia que nos dimos aquella noche fría. Te regalo nuestra ultima discusión y te regreso tus palabras hirientes. Te obsequio nuestros primeros "te quiero", y te envió nuestra primera cita, aquella abajo del sol, llena de risas y nervios.

Te regalo nuestra primera pelea, que era caótica y que parecía imposible que se repitiera.
Te regalo nuestros intentos de cuatro años y te pido perdón por no haberlo dejado de intentar antes. Te mando, por medio de estas letras que jamás leerás, un "perdón" que no pediste, pero que te regalo, en este día lleno de obsequios, junto con todo lo que me hiciste y todo lo que no hiciste.

Te regalo todas las lagrimas de estos 4 años y te prometo que jamás te regalaré ni una más.


jueves, 23 de febrero de 2017

Cuando me haces falta.

Podría usar miles de palabras rebuscadas e inusuales, pero hoy, hoy quiero hacer y escribrir todo a secas.


Te quiero aquí, del presente conmigo.
Te necesito a mi lado, del verbo justo ahora.
Te amo libre, del diccionario junto a mi.

Hoy como nunca había hecho comprendo muchas cosas raras de la vida, iniciando por conocerte, una hermosa coincidencia, un error gigante convertido en acierto en las madrugadas, nuestras madrugadas. Recuerdo nuestras peleas por tonterías, y tu risa razonando en mis paredes, recuerdo como se marcaba tu sonrisa en el rostro cuando decía un chiste pésimo, te amaba por disfrutar mis silencios y reírte de mis palabras.

Siempre disfrute y eh disfrutado de tu presencia; de tus besos a altas horas, y de tus lágrimas en la noche, cuando me decías que te ibas y yo casi corría hacia ti para pedirte que no lo hicieras.

Solo dios sabe todos nuestros errores y aciertos, nuestros miedos y costumbres, nuestros chistes locales, nuestras mil cartas y seis mil besos, nuestros juegos y nuestras peleas, los días difíciles, los más complicados, y estos días, en los que te extraño tanto que de mi pecho y de mis manos solo sale melancolía, en los que te necesito tanto como un niño a su madre, y te quiero besar tan fuerte, que si lo hiciera, rompería cada vena de tus labios para demostrarte la intensidad de mis sentimientos.

Solo nosotras sabemos lo que se siente abrazarnos fuerte, llorar en alto, reír en bajo, gemir en silencio y pelear sin audio. Me gusta tenerte a mi lado, porque a mi lado es donde debimos estar siempre, porque a mi lado es donde debes estar ahora.  


Complejidad sencilla.




Todo seria mas fácil si no existiera el tremendo miedo a perderte que tengo cuando anochece y te escucho llorar.

Cuando tu pierdes la fe, yo pierdo el suelo y la capacidad de caminar sin tambalear, y es que mi amor, cuando te veo querer correr lejos de mi, mi movimiento disminuye y mis piernas comienzan a temblar, porque me considero incapaz de volar si no tengo alas para planear.

Eres la armadura que cayó al suelo cada vez que sonreías, y la historia jamas contada. Eres lo único que mantiene cuerda a esta loca y calmada a esta adicta, eres la descarga rara de adrenalina que aparece cuando me besas y hacemos el amor, eres la risa que escucho cuando quiero dormir y la voz que me arrulla cada noche, y pensarte lejos puede hacer que cualquier estrella se haga agujero negro y cualquier galaxia colisione. Eres la ciencia de mis sonrisas y la física de mis pasos. 

Los días nublados nunca me habían mojado hasta que llegaste, tormenta de ojos grises, y cuando llegaste tu comencé a amar la lluvia y a temerle a los rayos, porque tenerte lejos es algo que parte, que rompe, que destruye... Y tenerte cerca me refresca, me limpia, me recuerda a cuando todo tenia una tonalidad azul y yo era menos gris. 

Todo seria mas fácil si no existiera el tiempo, si pudiera frenar el giro del universo y llenarte de besos las mejillas cuando tu mundo cae, porque mi amor, daría la vida por hacer la tuya mas feliz, daría mi tiempo para hacer el tuyo eterno, daría todo porque fuera un poco mas fácil.

miércoles, 22 de junio de 2016

Heroína.




Pobre de mi.

Quisiera narrarte verbo por verbo, párrafo por párrafo, espaciando todos nuestros puntos y seguido, seguido te pienso, y pienso en no pensarte, en tenerte sin quererte, porque desgraciadamente te amo, y te amo muchísimo, tanto que la palabra a veces solo se compara con las balas que llegan directo al pecho... ¿se entiende?

Duele saber que te toca  en las noches, y que la abrazas en publico por las mañanas, duele saberte ajena, para explicarme más detallado.

Te soñé una noche de noviembre, mi chica perfecta, y te me presentaste una tarde de febrero, con tus grandes ojos grises  con ese lunar amarillo que tanto presumes... Con tu hoyuelo, ese que sale cuando te hago sonreír y te pones roja.

Me revienta la médula pensarte amándola, y no es enojo, es egoísmo emocional, es egolatría y miedos de abandono, porque te quiero, y a veces, cuando me amas, también te amo. Resultas difícil de dejar, heroína en todo aspecto, rescatandome y haciéndome sentir abstinencia. Me gustas tanto, sonrisa triste.

Me duele verte sufrir por ella, y me duele más ser la chica que espera a que la dejes... ¿dejar? dejémonos de tonterías, te amo, te quiero conmigo. Ya no quiero soñarte, ya quiero tenerte en mi almohada, en la madrugada, riendo y gimiendo, ya te quiero muy conmigo.


sábado, 30 de abril de 2016

Fémur.

Se supone él amor no es posesión, pero si se él amor es celoso.

No tolero la idea de saberte besándola, o pensarte haciendo él amor con él. Y es que, somos una pequeña gran nada, somos algo que no tiene forma ni sabor, y aunque a veces eres un chicle de menta, otras sólo eres malestar estomacal. Y te amo, te amo muchísimo, y se que he dicho muchos 'te amo', pero contigo todo me sabe a fresco, a nuevo. Y me da miedo perderte, que seas otro de mis cotidianos errores, y yo otra de tus normales infidelidades. Me da miedo que un día te vayas, uno así, de la nada en la madrugada. Que un día me dejes, o un día no aguantar "tenerte", y si, tenerte entre comillas, porque a veces eres muy mía y a veces muy de todos.

Hay días que te quiero tener, y otros en los que perderte suena factible. Pero me aterra no volver a tenerte, que seas un día soleado y yo siga siendo él día nublado que conociste. Y perdón si soy idiota y te ataco con mis cosas, si pienso en esto como algo egoísta y te quiero para mi, pero perdón, no se querer a medias, y cuando te digo que te amo lo hago entero, a todo... Y tu sujetas su mano, y después tomas mi pie.

jueves, 17 de marzo de 2016

Hoyuelos.




Yo no puedo prometerte no lastimarte.

Soy pendeja, así, a secas. Tomo decisiones estúpidas, la cago continuamente y jamás he podido despertar con alguien quien realmente ame. Son mis reglas, mi vida no está tan bien supongo.

No soy constante y puedo arruinar todo en un momento, pero puedo asegurarte que en este momento eres dueña de la mayoría de mis pensamientos, que despierto y creo hologramas mentales de tu sonrisa, que te quiero como no pensé querer a nadie más. Que adoro tu sonrisa y tu risa, que no me molestan tus defectos, que de hecho, ellos te hacen perfecta y que podría soñar con tu cara o no dormir por verla.

Puedo decirte que lo arruinaré muchas veces, que cometeré errores increíbles, que llegaré tarde alunas veces y otras llegaras tarde tu. Que nos vamos a pelear como nadie ha peleado, y que nos vamos a encontentar como nunca lo has hecho.

Yo quiero molestarte y hacerte enojar mil veces, que hagas esa cara sexy que solo tu haces cuando te molestas, y que me digas que me amas mil veces. Porque no se, no se si te ame, pero me gustaría que tu lo hicieras. Porque te adoro, porque adoro nuestras platicas en la noche, porque adoro cuando te pones roja y nerviosa, y porque eres mi noche preferida.

No puedo prometer que no te lastimaré.